Pueden dividirse en estrategias de aprendizaje cognitivas, estrategias metacognitivas y estrategias de aprendizaje socioemocionales, dependiendo de la fase o la situación en la que se encuentre el estudiante: antes, durante o después de adquirir sus conocimientos. Y es el alumno quien debe aprender a identificar cada una de estas instancias y trabajar en pro de estas.
¿Por qué son importantes las estrategias de aprendizaje?
Las instituciones educativas necesitan hacer optimizaciones de metodologías pedagógicas de forma constante para alcanzar los estándares de calidad necesarios. Esto, por supuesto, requiere el apoyo del equipo docente, pues son ellos quienes conocen mejor los objetivos de aprendizaje y la manera en la que los estudiantes adquieren el conocimiento hoy en día.
Su importancia radica en que permiten ofrecer a los estudiantes mejores herramientas para interiorizar la información de forma fácil y eficaz y, a su vez, son importantes porque facilitan a las metodologías pedagógicas sostenerse de forma sólida a través del tiempo.
Ahora bien, las estrategias de aprendizaje no es lo mismo que estrategias de enseñanza. Estas últimas aluden a la planificación que hace el docente para ofrecer un modelo de enseñanza que promueve un mejor aprendizaje de los estudiantes.
En cambio, las estrategias de aprendizaje son procedimientos de tipo mental que debe seguir el estudiante, para que la información que se le está trasmitiendo realmente sea apropiado para él. Esto hace que mejore la calidad del aprendizaje del alumno, gracias a que permite facilitar la asimilación de nuevos conocimientos.
Características de las estrategias de aprendizaje
- Incluyen varias técnicas para estimular la apropiación del conocimiento.
- Su objetivo es mejorar el proceso de interiorizar nueva información.
- Son ejercicios que pueden realizarse de forma extracurricular.
- Están dirigidas a la persona que aprende, es decir el estudiante.
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Identifica las estrategias de aprendizaje más comunes
Ahora que conoces un poco mejor de qué se tratan, es importante que sepas cuáles son algunos de esos métodos para adquirir el conocimiento y por qué es tan importante que sean aplicadas por el alumno durante su proceso educativo.
Justamente, existen diferentes técnicas, cada una con sus características propias. Pero, ¿Cómo se clasifican las estrategias de aprendizaje? Aquí te presentamos los 3 métodos que te pueden ayudar a identificar mejor su finalidad, para saber con exactitud qué son.
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1. Estrategias de aprendizaje memorística
Esta técnica de aprendizaje se caracteriza, como su nombre lo indica, por valerse de la memoria. Consiste en repasar lo aprendido con el objetivo de retener la información y que, de esa forma, sea fácil de recordar para el estudiante con el paso del tiempo.
Hay algunos estudiantes a los que les cuesta memorizar más que a otros. Lo que se sugiere con esta técnica es que los alumnos encuentren las maneras para memorizar los conceptos, pues así como no todos memorizan de la misma forma, tampoco pueden aplicar las mismas técnicas para hacerlo. Destacar, subrayar o repetir, son algunos de los ejercicios ideales para generar un mejor aprendizaje.
2. Estrategias de aprendizaje significativa
El aprendizaje significativo es un tipo de estrategia mucho más elaborada, que requiere de una participación más constante por parte del estudiante para lograr que lo que esté aprendiendo sea realmente significativo y relevante dentro de su propio proceso de aprendizaje académico.
Se recomienda, en este caso, que el estudiante aprenda a procesar de manera simple y compleja los conocimientos aprendidos, por medio de actividades que impliquen generar una nueva forma de abordar la interiorización del conocimiento, como lo serían las analogías, los mapas mentales, los resúmenes, los mapas conceptuales, entre otros.
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3. Estrategias de aprendizaje basada en la recordación
Esta técnica de aprendizaje se relaciona mucho con la primera. Después de que el estudiante ya logró memorizar todos los conceptos y conocimientos previos, es importante que empiece a hacer ejercicios de recordación que le permitan retener tales conocimientos por mucho más tiempo, para que puedan serle útiles en el futuro.
En este caso, es importante que el alumno encuentre las herramientas necesarias para repensar la información previamente adquirida, y esta se convierta en información útil que sea de fácil análisis y comprensión en su día a día.
Ahora que conoces bien cómo se clasifican los diferentes tipos de estrategias es momento de entrar en materia para saber ¿Cuáles son lo métodos de aprendizaje más utilizadas en el sector educativo? y ¿por qué es importante tenerlas en cuenta dentro de tu procesos de enseñanza?
4. Estrategias de ensayo para tareas básicas y complejas
Estas son técnicas de aprendizaje que, aunque tienen la repetición como factor común que las unifica, se realizan de forma diferente. En el caso de las estrategias para tareas básicas, se aconseja que los estudiantes hagan ejercicios como la repetición en voz alta, seguir algunas técnicas mnemotécnicas o patrones de colores.
En el caso de las estrategias de tareas más complejas, los estudiantes pueden empezar a hacer ejercicios cognitivos que requieren de mucha más atención al detalle, como lo son los subrayados y destacados o copiados. En este punto, la idea es que la repetición sea más literal con respecto a la idea original. También es crucial la autorregulación y la gestión del tiempo que se dedica a interiorizar el conocimiento.
5. Estrategias de elaboración para tareas básicas y complejas
En este punto, ya no se trata de repetir para memorizar, sino de elaborar y crear a partir de lo aprendido. En el caso de las estrategias para tareas básicas, podríamos encontrar algunos ejercicios que involucren las habilidades verbales e imaginales, como la imaginería mental, el uso de oraciones, rimas, parafrasear, entre otros.
Una manera efectiva que se recomienda para las tareas complejas es que el estudiante desarrolle un conjunto de actividades que involucren su imaginación y lleven su creatividad al siguiente nivel. Se recomienda que aquí utilice los conocimientos previos y sus propias experiencias para elaborar resúmenes o creación de analogías. Esto, además, influirá de manera directa en el desarrollo de habilidades como el pensamiento crítico, entre otros.
6. Estrategias organizacionales para tareas básicas y complejas
Como su nombre lo dice, este tipo de estrategias están relacionadas con la organización y el orden de la información. Para las tareas básicas se pueden realizar diferentes esquemas que permitan darle un orden a la información y los conocimientos recibidos, para que sea más útil su uso.
Por otro lado, las estrategias para tareas complejas requerirán de un esfuerzo aún mayor, pues ya no es suficiente con organizar la información, sino que se debe dar un orden que sea lógico. Aquí entran a jugar un papel importante los mapas conceptuales o los cuadros sinópticos, entre otros.
7. Estrategias de monitoreo de comprensión
Las estrategias de monitoreo de la comprensión son muy útiles en una fase más adelantada del proceso de aprendizaje. Estas permiten corroborar qué tanto ha aprendido el estudiante y si realmente es útil para él los conocimientos adquiridos. Asimismo, se puede identificar qué aspectos no ha aprendido de manera satisfactoria y tomar medidas al respecto.
Una buena manera de hacerlo es a través de evaluaciones. Estas se pueden desarrollar de manera continua durante el proceso de aprendizaje, lo que ayudará a corregir en la marcha, o en estancias más decisorias, con el fin de mejorar la calidad de los resultados finales.
8. Estrategias afectivas
En las estrategias de aprendizaje afectivas de aprendizaje encontramos técnicas que van más direccionadas hacia tener un mejor ambiente educativo que permita ofrecer mucha más tranquilidad al estudiante para realizar sus actividades académicas.
Esto hará que el estudiante trabaje y descubra sus propias emociones, actitudes y motivaciones, para encontrar aquellos aspectos que le generen pasión y pueda mejorar esas habilidades para las que es bueno.
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¿Cómo promover la aplicación de los diferentes tipos de estrategias de aprendizaje?
Resulta difícil calificar a un grupo de técnicas como “las mejores estrategias,” porque cada estudiante puede adaptarse mejor a una u otra.
Sin embargo, sí existen diversas maneras de estimularlas en las jornadas escolares. Y esto se debe a que los estudiantes aprenden de forma distinta, tienen un estilo de aprendizaje diferente y, además, cuentan con destrezas y falencias variadas, lo que evidencia la necesidad de tener estrategias más diversificadas, hasta lograr una meta de aprendizaje contundente.
Aquí te contaré 5 formas efectivas de promover las estrategias de aprendizaje en los estudiantes.
1. Fomentar la oralidad y las actividades en grupos
Una forma efectiva de estimular el aprendizaje de los estudiantes, es mejorando sus habilidades comunicativas. Considerar promover espacios en los que expongan sus ideas de forma constante frente a sus compañeros, ayudará a incentivar un ambiente más participativo.
Realizar trabajos de forma grupal en los que participe toda la clase, también será ideal para que los estudiantes sientan el salón de clases como un lugar más colaborativo, mientras pueden poner en práctica sus habilidades comunicativas.
2. Ofrecer mayores recursos educativos
Desde infografías, ilustraciones, mapas, guías, resúmenes, videos o podcast, cualquier tipo de recurso será más que bienvenido durante las clases, porque ofrecen muchas más oportunidades para que los estudiantes aprendan de acuerdo a lo que más resuene con sus intereses de enseñanza-aprendizaje.
Estructurar, revisar y ajustar las técnicas de aprendizaje, de tal manera que sea cada vez más innovador la ruta de enseñanza, será fundamental para motivar a cada estudiante para que se sienta cómodo durante las clases.
3. Hacer pausas constantemente
Si las clases son largas y densas, es momento de pensar en hacer uso de pausas activas en las clases presenciales o cursos online. Está comprobado que los estudiantes no pueden mantener la atención por un tiempo prolongado de clase y de ahí la importancia de ofrecer un descanso para que los estudiantes puedan hacer ejercicios de estiramiento, puedan hidratarse, ir al baño o comer algo saludable.
4. Brindar feedbacks
No importa si la clase es presencial o es virtual. Es necesario que los profesores se tomen el tiempo de ofrecer feedback durante y después de sus clases.
Una retroalimentación exitosa y enriquecedora es aquella que se ofrece de forma continua y que le permite distinguir, tanto a docentes como a estudiantes, cuáles son esos intereses, esas habilidades o ese material de estudio que realmente le sirve al estudiante.
Esto será ideal para evidenciar los principales problemas, tomar notas sobre ellos y ver qué estrategias de aprendizaje se pueden ir implementando en el camino de forma más eficiente.
5. Contar con recursos tecnológicos
Para las nuevas generaciones, los recursos tecnológicos son un elemento más del día a día, y por eso es importante tener herramientas digitales lo suficientemente relevantes para hacer de las clases espacios más dinámicos y, sobre todo, lugares de aprendizaje que estén a la vanguardia.
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